lunes, 14 de mayo de 2012

Nuestros ancestros





Les presentamos este vídeo realizado por un grupo de estudiantes de la universidad de la serena el cual nos presenta el tema que hemos tratado a lo largo de nuestro blog, LOS PUEBLOS ORIGINARIOS DE CHILE

CHONOS Y CUNCOS

Los chonos (pescadores) se mezclaron con los cuncos (agricultores), imponiendo su carácter de pueblo marítimo. Practicaban la pesca y también la cacería de lobos marinos, para lo que utilizaban las embarcaciones construidas por ellos, llamadas dalcas. Estas eran tres tablones que habían sido curvados con agua y con fuego, y que estaban unidas entre sí mediante fibras vegetales. Habitaron la parte del sur austral, incluyendo los actuales Archipiélagos de los Chonos y de las Guaitecas, donde navegaron por los canales y por el tempestuoso Golfo de Penas.



Existe evidencia de la presencia de algunos objetos al parecer de origen polinésico, como el remo de paleta ancha denominado pagaya y el empleo de un ancla de madera y piedras llamada sacho, lo que teóricamente confirmaría los viajes de grupos polinésicos a las costas de Chile, y especialmente a Chiloé.

Su organización social consistía en bandas muy pequeñas que solo se mantenían permanentemente unidas a nivel familiar. Las mujeres participaban en actividades económicas básicas, mariscando en las playas; criaban perros lanudos, cuyo pelo era aprovechado para fabricar telas muy toscas.

La alfarería aparentemente les fue desconocida, pero fabricaron lanzas, masas o garrotes, anzuelos de madera y redes de fibra vegetal.

Cuando los chonos no estaban navegando, vivían en armazones de cuero y madera o en cavernas naturales.

Los pescadores del sur cazaron al lobo marino para utilizar su carne, cuero y grasa.
Fuente: Icarito Diario La Tercera.

HUILICHES



Huilliche, quiere decir “Gente del Sur”. Ellos poblaron la depresión intermedia desde el río Toltén hasta el Seno de Reloncaví. La zona específica de éste asentamiento indígena fue Osorno, Llanquihue y Valdivia. A la llegada de los españoles el territorio se vio considerablemente reducido. 
Este grupo étnico se parecía mucho a sus vecinos Mapuche y Picunche. Sin embargo, junto a los últimos tenían un gran desarrollo cultural. 
Los Huilliche tenían una lengua similar a la de los Mapuche, teniendo sólo algunas variaciones dialécticas. Se llamaba Ste Sungun. 

La Gente del Sur no se caracterizó por su habilidad guerrera y su población siempre fue más pequeña que las de los Araucanos. Una de sus grandes virtudes fue la variedad de cultivos que fueron capaces de producir, entre ellos el maíz y la papa.

Dentro de sus actividades económicas sobresale la ganadería: la crianza de guanacos y huemules los abastecía de carne, piel y lana para sus tejidos.

Se organizaban en levo o tribus, sin tener un jefe central. Su estructura es patrilineal.

Las viviendas semejantes a las rucas las confeccionaban de varas cubiertas con ramas. La duración de ellas era entre 10 y 12 años.

Huilliche
La presencia en la Isla de Chiloé les permitió desarrollar la pesca en embarcaciones como las dalcas o piraguas, hechas de tablas y cortezas. Lanzaban desde las dalcas 12 redes con las que pescaban mariscos. Es en Quellón donde se presentaba la mayor población Huilliche. 

Su alimento principal era el maíz y el poroto, animales y pescados. 


La religión se hace presente en la comunidad indígena Huilliche. Son muchas sus creencias, manifestaciones, cuentos y leyendas de éste pueblo. Para ellos Chaotroquin creó al Huilliche. Otras ideas dicen que los hombres brotaron de la tierra.


Fuente: Icarito Diario La Tercera.

MAPUCHES

Los mapuches se ubicaron entre el Itata y el Toltén, aunque a la llegada de los españoles, se les confinó a un sector que tenía como límite norte el Bío Bío, comarca conocida con el nombre de Araucanía o Frontera por haber sido la zona de contacto con los españoles. 

Su nombre "mapuche" viene de mapu= tierra y de che= gente, es decir significa gente de la tierra. 
Los mapuches son de estatura mediana, tronco largo y bien desarrollado, espaldas anchas, cuello corto y grueso, cara redonda y frente estrecha, pómulos salientes y barba escasa, boca grande y labios gruesos, pelo oscuro y liso. 
sus brazos aunque gruesos, son menos musculosos que los del europeo. En cuanto a los ojos son pequeños, oscuros y horizontales. El cutis es moreno, sin el tinte cobrizo y amarillento de otros indios de la América meridional. 

Su forma de vida a la llegada de los españoles, era la de un pueblo sedentario que vivía de una agricultura y una ganadería aún atrasadas. 

Actuales habitantes 


Sus actuales integrantes se aproximan a la cantidad de 500.000, concentrados especialmente en las localidades rurales de la IX Región (La Araucanía), en la zona de Cautín, además de encontrárseles, de norte a sur, desde la provincia de Biobío hasta la de Chiloé. 

En la IX Región, cuyos faldeos cordilleranos llegan hasta la Argentina, vive una rama de este grupo que puede llamarse mapuche-pehuenche, formada por unas 1.200 personas. 

En la zona de Chiloé, en los lugares de Chadmo y Compu, se mantiene otra, de aproximadamente 450 personas, y que sería la mapuche-huilliche. 

Como los anteriores, esta etnia es bilingüe, pero ha preservado duramente su propia lengua, tanto para comunicarse y expresarse en su vida diaria, como en su uso mágico, religioso y artístico, especialmente a través de cantos, danzas y oraciones. Se mueven ellos en un ámbito social y cultural de actividades eminentemente agrarias, con una poderosa visión filosófica sobre el universo y la lucha del bien y del mal. 

Los orígenes y comienzos del pueblo mapuche presentan todavía varias interrogantes profundas. Por lo que se sabe, desde sus primeros contactos con los conquistadores españoles hasta nuestros días, se concluye que poseían una gran cohesión social y adaptabilidad para superar diferentes crisis. 

Si trazamos una línea transversal uniendo Santiago con Buenos Aires, en todo el territorio que queda al sur de esta línea se observa influencia mapuche. En el siglo pasado sus arremetidas llegaron hasta la capital de Argentina, país donde iniciaron un proceso de mestizaje con los indios pampas. 

En la actualidad se comprueba su presencia en las ciudades, advirtiéndose en Santiago un considerable número de sus integrantes. 

DATOS IMPORTANTES 

La Machi 

La machi es la encargada de dirigir los ceremoniales mapuche. Los más conocidos son el Nguillatún (rogativa al cielo por la escasez de agua) y el Machitún (función mágico-terapéutica). Durante la realización de ellos se mezclan las danzas rituales, con oraciones y cantos. 

Arte Mapuche 

Los Mapuches : Origen y habitantesLos tejidos son de colores parejos y con formas de cruz, zig-zag y rombos. La platería mapuche, por su parte, se basa en sus creencias religiosas. Cada una de las piezas posee un significado especial. El material utilizado es la plata con técnicas de fundición y laminación por percusión fría o caliente. Retrafe o platero se llamaba al varón que realizaba tradicionalmente este oficio. El nombre de las piezas que conforman el ajuar son: trarilonko (cintillo), lloven nitrowe (tocado femenino), chaway (aros), traripel (ceñidor de cuello), tupu y katawe (alfiler para la ropa), kilkai (collar colgante), sükill y trapelakucha (colgante pectoral, en la foto), prenteor (colgante pectoral de tres cadenas). Accesorios ecuestres como la ispuela (espuela), istipu (estribo) o los herrajes (riendas, cabezadas y el freno) llamadas en mapudungún witram plata, kafishatu y ketrel piriña, respectivamente, son de marcada influencia hispana. 

El Baile 

Kuimin, Purrún, Mazatún, Machipurrún, Lañkañ, Wutrapurrún, Choique Purrún y Awún son los bailes mapuches conocidos. Todos ellos se realizan durante festividades, ceremonias o rogativas. 

Chueca 


La chueca es un juego de origen mapuche. Una pelota de caucho y palos terminados en una punta curva son los implementos que se utilizan en la práctica. La cancha se rodea de ramas verdes. La chueca se acompaña de rezos, bailes rituales y banquetes y su objetivo era unir a las comunidades. En 1647 se prohibió que los mapuches practicaran la Chueca. 
Fuente: Icarito Diario La Tercera.

PICUNCHES


Este pueblo se ubicó entre dos importantes ríos: el Choapa, por el norte, y el Itata, por el sur.

Los picunche fueron agricultores y, por lo tanto, sedentarios. En la zona donde vivieron, el agua era abundante y el clima cálido. De esta actividad, obtenían papas, calabaza, maíz, porotos y ají de la tierra.

También criaron animales, especialmente llamas y guanacos. De ellos sacaron carne y lana para fabricar sus vestimentas. 
Los Picunche se instalaban en grupos de aproximadamente 300 personas, en pequeñas aldeas. Hacían sus casas de barro y techo de totora. En cada una vivían unas 30 personas, entre el padre, las esposas, los hijos, y otros familiares directos.

Su costumbre establecía que los hombres mandaban o dirigían; la máxima autoridad era el padre y luego venía el hijo mayor.

Sólo en caso de emergencia, en especial si ocurría una guerra, había un jefe que lideraba a los demás: el cacique Sin embargo, los Picunche conformaron un pueblo pacífico.

Sus costumbres y creencias

Creían en la vida después de la muerte. Sus tumbas eran muy sencillas y se distinguían claramente porque, sobre ellas, había un montoncito de tierra con piedras.

Los Picunche fabricaron su propia cerámica (vasijas, jarros y fuentes), y también sus herramientas para trabajar la tierra, además de otros instrumentos de uso diario, como pipas y piedras para moler el maíz.

Uno de los misterios de los Picunche es el de las piedras tacitas - redondeadas por los bordes y con una hundidura al medio-, y otras piedras redondeadas que presentaban una perforación al centro; hasta el día de hoy no se sabe para qué las utilizaban.
Fuente: Icarito Diario La Tercera.

DIAGUITAS


Al sur de los atacameños vivían los Diaguitas. Ocupaban los valles comprendidos entre los ríos Copiapó y Choapa.
Agrupados en aldeas y en viviendas de material ligero, se dedicaban a la agricultura y la ganadería.
Utilizaron terrazas de cultivo e irrigaban sus tierras por medio de canales de regadío. Sembraban fundamentalmente maíz, porotos, quinoa y calabazas. Realizaban intercambios comerciales y usaban la llama como medio de transporte. 

La gran distancia que separaba a los diaguitas del mar los hizo mantener contacto con los Changos quienes los abastecían de los productos por ellos extraídos.
Para que la tierra entregara un fruto fuerte aprendieron a utilizar el abono de guano.
La metalurgia diaguita se manifestó en armas, herramientas y adornos corporales de oro, plata y cobre.
Su idioma fue el kakán, lengua totalmente extinguida en la actualidad.

Artesanía

Notable fue su alfarería, ninguna otra cultura de Chile pudo alcanzar tal grado de perfección en la cerámica. Entre los ejemplares más característicos de ésta destacan: las escudillas, que eran platos con paredes rectas decoradas con figuras geométricas; los jarros zapato, de boca ancha con cuerpo alargado hacia un extremo, no se pintaban ni decoraban, pues servían para cocer alimentos; y el jarro pato, con la misma forma del anterior, con un asa arqueada y la figura de un pájaro pintado en un extremo, por lo que asemejaba a un pato nadando. Otras artesanías llevaban como motivo la cara de un hombre.

Los Diaguitas confeccionaron dos clases de tiestos alfareros: uno sencillo y sin decoraciones destinado a fines domésticos, y otro utilizado en ciertas ocasiones, pintado con dibujos geométricos en rojo, negro y blanco.

Su caracter sedentario les permitíó construir casas o chozas de base de piedra y armazón de palos cubierto por ramas. La más grande pertenecía al jefe y era la única que podía tener más de una habitación. Varias construcciones formaban una aldea que se organizaba en un señorío. 

La unidad básica de organización era la familia. Practicaban la poligamia y varias familias consanguíneas vivían en las aldeas, el jefe era el más anciano y la tierra era propiedad común.
En lo que respecta a la religión, creían en una vida más allá de la muerte, en las tumbas se encontraron ajuares y objetos personales del difunto. Los enterraban con armas, alimentos y adornos. 

Cuando entraron en contacto con los españoles, los Diaguitas y Atacameños habían adoptado ciertas creencias incaicas, de cuyo imperio habían pasado a formar parte.

Fuente: Icarito Diario La Tercera.

ATACAMEÑOS

Los atacameños son los descendientes de la cultura prehistórica llamada por los arqueólogos San Pedro, la cual desciende, a su vez, de otra conocida como Tilocalar, quienes fueron los primeros grupos aldeanos y domesticadores de camélidos de esa zona. Esta cultura mantuvo su sistema de vida por casi 700 años, hasta que se asientan en el oasis de San Pedro de Atacama, cambiado su forma de vida debido al mayor desarrollo de la agricultura.

Posteriormente, la influencia cultural Tiwanaku detonó una diferenciación social más marcada, con una elite de atacameños que controlaba las relaciones con otros grupos y el importante tráfico caravanero. Señores atacameños fueron enterrados usando ropas y gorros con diseños y técnicas usadas por la gente de Tiwanaku. También habían otros objetos como adornos de oro, vasos-keros de cerámica y finos artefactos para el consumo de alucinógenos, todos importados o decorados con los diseños de dicho Estado altiplánico.

Luego de la caída Tiwanaku, esta sociedad se transforma y se junta formando señoríos con tradiciones propias, al igual que los aymara. Sin embargo, ellos heredaron muchos conocimientos e ideas traídas por los grupos de Bolivia, como el uso de sistemas de andenerías y regadío bastante complejos para mejorar la agricultura. Construyeron fortalezas o pukaras, que demuestran las tensiones que existían entre los distintos señoríos. Sobre estos grupos se impone posteriormente el Inka y luego los españoles, cambiando completamente la cultura y sociedad atacameña.

Economía:En la actualidad, los atacameños practican la agricultura y horticultura en los oasis y en las quebradas, con productos como la papa, la quínoa, la tuna, el maíz, la calabaza, el zapallo y el ají. También desarrollaron la ganadería de llamas y alpacas. Recolectan leña, plantas, frutos y hierbas medicinales. En el pasado, para conseguir otros alimentos, intercambiaban con Bolivia y el noroeste argentino.

Arte:Los atacameños desarrollaron especialmente artes como la cerámica, la cestería, los textiles, la orfebrería, el baile y la música. En la antigüedad, durante su etapa San Pedro, la cerámica característica de estos grupos era de un color negro o rojo, y muy pulida. Con ella fabricaron jarros, vasijas, tazas y cántaros. En cestería hicieron grandes canastos y platos. Con lana de camélidos tejieron bolsas, fajas, paños y frazadas.

Organización social:La base social de la cultura atacameña es la comunidad, compuesta por unidades familiares. Una persona se hace parte de la comunidad cuando posee tierras cultivables y participa de los trabajos colectivos, como la mantención de los canales, la siembra o la cosecha. La comunidad organiza y controla los recursos naturales de producción, determina la entrada de nuevos integrantes y defiende los intereses frente a otras comunidades o al estado.

AYMARAS

En lo que hoy es el Norte Grande de Chile encontramos culturas que por mucho tiempo mantuvieron contacto con algunas de las grandes tradiciones culturales andinas. Entre ellas están los aymara, quienes habitaron una gran extensión de territorio que incluye los alrededores del lago Titicaca en Bolivia, el noroeste argentino y el norte de Chile, en las regiones de Arica, Parinacota, Tarapacá y Antofagasta. Dentro de estas regiones se ubicaron en distintos pisos ecológicos, como el altiplano y la puna (a 3.800 metros sobre el nivel del mar), la sierra y los valles altos de la precordillera; los valles bajos y las ciudades del norte; los centros mineros y la costa.

Los ancestros de los aymara nacen a orillas del lago Titicaca, como pequeñas aldeas que se desarrollaron de forma importante al ser influenciados por la cultura Tiwanaku, que implementó importantes avances afectando gran parte de la zona norte de Chile y Argentina. Entre los rasgos que los destacan, está la construcción de edificios en piedra finamente tallada y una decoración que tenía como diseño emblemático un personaje llamado el Señor de los cetros.

Luego de la caída de Tiwanaku, estos ancestros de los aymara se juntaron en grupos y formaron los señoríos collas, dentro de los cuales algunos llegaron a obtener mucho poder. Por mucho tiempo vivieron de forma independiente, pero hacia el año 1400 d.C. fueron conquistados por los inkas, el imperio más importante de Sudamérica, que lograron gobernar una gran extensión de territorio, desde el sur de Colombia hasta el centro de Chile. Si bien los aymara se encontraban bajo su poder cuando entraron en contacto con los españoles, mantuvieron su mismo sistema de vida hasta la conquista que desarmó su sistema de señoríos y prohibió su religión y creencias.

Economía:Como sistema de vida, los aymara aprovechan y usan diversos recursos de cada piso ecológico en que viven. Los intercambian y los trasladan entre el altiplano y la costa. Practican la agricultura y horticultura en chacras, en terrazas y en los oasis del desierto. También trabajan la ganadería de llamas, alpacas y corderos.

Arte:Entre algunas de las expresiones de arte aymara se conoce la textilería, con la cual fabricaron en el pasado sus ropas de hermosos colores y diseños. Tejieron gruesas camisas de lana de camélido, fajas que se amarraban en la cintura, bolsas llamadas chuspas donde guardaban hojitas de coca y todo tipo de hierbas. Hicieron sandalias de cuero, complicados gorros y adornos como joyas, vasos y bastones de mando de plata. Otro aspecto importante en la vida de los aymaras era la música y el baile, que además de ser una diversión, eran importantísimos en las fiestas y celebraciones religiosas.

Organización social:El pueblo aymara es bastante heterogéneo ya que está formado por grupos diferentes. Se organiza según el territorio que ocupan, así en cada piso ecológico se encuentran distintos grupos, que en su conjunto formaron la sociedad aymara. En el pasado existieron distintos pueblos-capitales donde se intercambiaban productos y trabajo, y donde se realizaban distintos rituales.

CHANGOS

Los Changos, habitaron la costa del norte de nuestro largo Chile, desde Arica al Río Choapa, alcanzando algunos grupos hasta la zona del Aconcagua. Iquique fue el lugar donde más concentración de Changos hubo. 

El pueblo de los Changos fue pescador y nómada. Se dedicaban a la extracción de moluscos y peces y, a la cacería de lobos marinos. Sus herramientas eran arpones y anzuelos. Utilizaban balsas, confeccionadas con el cuero de los lobos marinos y cosidas con fibras vegetales. La singular estructura de los botes consistía en dos odres de forma cilíndrica inflados y unidos entre sí por medio de sogas. Al centro dejaban un espacio que les permitía poner una tabla sobre la que iban los Chonos de rodillas. Para desplazar la embarcación utilizaban una remo de paleta. 

Algunas veces cambiaban sus peces por maíz. 

Este pueblo nómade fabricaba sus casas con la misma piel de lobo que sus barcazas, siendo exclusivamente un toldo o carpa de cuero que armaban y desarmaban cuando consideraban que debían dejar el lugar donde estaban. 

El hecho de no permanecer por mucho tiempo en un lugar, les impidió cultivar la tierra. 

A la llegada de los españoles, en 1536, un grupo de Changos habitaba en la costa de Valparaíso. 

Más al norte los conquistadores conocieron a Carande, jefe de la tribu de Changos que habitaba esa zona costera, rebautizándolo como Papudo. Aquel poblado es conocido hasta el día de hoy con ese nombre, avistado por primera vez por las fuerzas marítimas que prestaban apoyo a Diego de Almagro en 1536.


Fuente: Icarito Diario La Tercera.

MAPA DE PUEBLOS ORIGINARIOS DE CHILE
    Te damos la bienvenida a nuestro blog el cual tiene como objetivo principal dar a conocer  diversos pueblos que habitaron nuestro país, a quienes se les denomina Pueblos Originarios, Precolombino (antes de la llegada de Cristóbal Colón) o prehispánicos (antes de la llegada de los españoles). Para sobrevivir debieron adecuarse a las condiciones climáticas de cada lugar y aprender de de lo que les brindaba la naturaleza para satisfacer sus necesidades. Muchos de los descendientes de estos pueblos originarios mantienen vivas algunas de sus costumbres y tradiciones en la actualidad.